"Rey" Zambada afirma que sobornó a sobrino de García Luna para poner a aliado en Siedo

Jesús El Rey Zambada aseguró que no sólo sobornó a Genaro García Luna para brindar protección al cártel de Sinaloa, sino que también hizo diversos pagos, uno de ellos por 350 mil dólares para que Édgar Bayardo, comandante de la Policía Federal, ingresara a trabajar en la entonces Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (Siedo) y desde ahí filtrara información al cártel de Sinaloa.

El Rey Zambada dijo que este soborno se lo entregó a Bayardo, quien a su vez se lo dio a Víctor Hugo García, sobrino de García Luna, quien consiguió una plaza para que el aliado del cártel de Sinaloa ingresara a la Siedo.

El hermano de Ismael El Mayo Zambada señaló que el objetivo de este movimiento era que Bayardo filtrara al cártel información sobre investigaciones en curso y cargamentos identificados por la DEA. Agregó que al excomandante de la Policía Federal le pagaban 50 mil dólares mensuales, a fin de tenerlo como aliado.

Dijo que además de los 350 mil dólares para que ingresara a la Siedo, realizó tres pagos por 100 mil dólares cada uno para que Bayardo ascendiera en la institución y así brindarles información

“Cuanto más poder tenía, más promociones, más uso podía tener para el cártel. Nos pasaba información de operativos, investigaciones. Nos ayudaba con seguridad también”, dijo El Rey Zambada, quien recordó que por sus servicios le regaló una Jeep Cherokee blanca blindada.

La DEA tenía conocimiento de los nexos de Bayardo con el cártel de Sinaloa, ya que el agente Miguel Madrigal, quien también testificó en el juicio contra García Luna, dijo que tuvo acceso a un video en el que se ve al entonces comandante de la Policía Federal llegar a bordo de su Cheerokee a la casa de El Rey Zambada en la Ciudad de México.

Tras la captura del hermano del Mayo Zambada, en 2008, el agente dijo que tras conversar con Bayardo este lucía nervioso y afectado por la detención del miembro del cártel de Sinaloa.

Édgar Bayardo se convirtió en el testigo protegido Tigre de la entonces Procuraduría General de la República. El exinformante del cártel de Sinaloa fue asesinado en diciembre de 2009 en una cafetería en la colonia Del Valle, en la Ciudad de México.