Estábamos dormidos en mi casa y de repente me despierta alguien. Miro, veo caras que no conozco y estaba encañonado con una pistola. Estábamos todos rodeados de gente armada hasta los dientes con metralletas y artillería pesada muy grande”
En un determinado momento se me queda el jefe mirando y dice: ‘chavos, es Miguel Bosé’. Se quitó la máscara y me dijo que era mi fan. Yo le dije que entonces teníamos que llevar las cosas por buen camino o se acababan los conciertos. Incluso un miembro de la banda me pidió un selfie”.
Antes de irse desató a Tadeo y le dijo que en media hora se terminara de soltar y que después desatare al resto, pero que no dijera nada”.