“Hay un malestar de la ciudadanía en general, tanto de la que vive en Guerrero, como en el resto del país, por es un evento que ha sido pésimamente llevado por el gobierno federal, desde la prevención, hasta la respuesta que por supuesto, no fue inmediata”.
La dirigente estatal del PRI exigió los tres niveles de gobierno en Guerrero coordinación, trabajo y ayuda real para las personas, ya que dijo, es inadmisible que haya familias enteras sin alimentos ni agua desde que sucedió la tragedia: “es necesario regresar el FONDEN con reglas de operación transparentes para conocer cómo se accede a esos recursos. En el presupuesto 2024 deben etiquetarse recursos para un nuevo Acapulco, uno urbanizado y planificado correctamente, para enfrentar este tipo de fenómenos naturales que inevitablemente llegarán”.
“La propuesta se resume en siete puntos: para este 2023 se piden 50 mil millones para reconstrucción; crear un seguro de desempleo para que la gente tenga un ingreso fijo y empleo temporal para que sean los propios guerrerenses quienes colaboren en la reconstrucción de sus ciudades; exceptuar a transportistas con hasta 50 por ciento del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) a gasolina durante la declaratoria de emergencia; que la CFE no pueda suspender el servicio de energía eléctrica, subsidios y esquemas de pagos postergados. Por otra parte, se propone dar un tratamiento especial para apoyar a las personas que tengan un crédito de vivienda; es decir, que se permita prorrogar pagos y condonar posibles intereses. Apoyos fiscales a las micro, pequeñas y medianas empresas, como deducción de hasta en un 100% las contribuciones que se deriven de pagos de sueldos y salarios y; convenios con empresarios”.