La justicia federal ha dejado sin efecto la suspensión provisional que protegía a Silvano Aureoles Conejo, exgobernador de Michoacán, de una orden de aprehensión. Con esta decisión, el político queda expuesto a ser detenido por delitos relacionados con peculado, lavado de dinero, asociación delictuosa y administración fraudulenta, con un presunto daño patrimonial superior a tres mil millones de pesos.
La jueza Sindy Ortiz Castillo, del Juzgado Decimoquinto de Distrito en Materia Penal, resolvió que la orden de captura emitida el 27 de febrero de 2025 es legal y vigente, por lo que Aureoles Conejo ya no cuenta con protección judicial.
El exmandatario había solicitado un amparo para evitar su detención, pero la jueza Jovita Vargas Alarcón, del Juzgado Noveno de Distrito en Materia Penal, negó la suspensión definitiva, argumentando que Aureoles no compareció ante la jueza de control ni pagó la garantía de un millón de pesos** que se le impuso como condición.
Las investigaciones señalan que el exgobernador y cuatro de sus excolaboradores habrían causado un daño patrimonial al estado de Michoacán mediante la compra a sobreprecio de cuarteles de la Guardia Civil en varios municipios.
Además, la Policía Federal Ministerial ha confirmado que Aureoles Conejo es considerado prófugo de la justicia, ya que no ha sido localizado en su domicilio y se ha detectado un flujo migratorio posterior a los hechos investigados.
Con esta resolución, las autoridades federales tienen vía libre para ejecutar la orden de aprehensión en su contra. Mientras tanto, el exgobernador aún puede impugnar la sentencia en un último intento por evitar su captura.