El Bayern Múnich volvió a demostrar su jerarquía continental al imponerse como visitante ante el Paris Saint-Germain y llevarse de la capital francesa tres puntos de oro que lo colocan en lo más alto de su grupo en la Champions League 2025-26. Con una actuación sólida, equilibrada y sin fisuras, el conjunto alemán se impuso por marcador de 2-1, en un partido intenso que evidenció la madurez táctica del cuadro bávaro frente a un PSG que sigue buscando identidad.
Desde el inicio, el Bayern tomó el control del juego gracias a su presión alta y a la precisión de su mediocampo. El primer tanto llegó al minuto 18 con una gran definición de Leroy Sané, tras una jugada colectiva que desarticuló por completo a la defensa parisina. Aunque el PSG reaccionó con empuje, el cuadro alemán mantuvo el orden y aprovechó los espacios para ampliar la ventaja al 63’, cuando Jamal Musiala firmó el segundo con un disparo cruzado imposible para Donnarumma.
El descuento llegó por parte de Kylian Mbappé en la recta final del encuentro, encendiendo la esperanza local con una jugada individual que mostró su explosividad habitual. Sin embargo, el esfuerzo no bastó: el Bayern resistió los embates finales y selló una victoria clave en su visita al Parque de los Príncipes.
Con este resultado, el equipo de Thomas Tuchel continúa su paso firme en el torneo, mientras que el PSG de Luis Enrique queda obligado a replantear su esquema tras otro tropiezo frente a un rival de jerarquía. Los bávaros suman tres victorias consecutivas y se perfilan como uno de los grandes favoritos para conquistar nuevamente la “Orejona”.
La prensa europea destacó la solidez defensiva de Matthijs de Ligt, la conducción impecable de Kimmich y el crecimiento de Musiala, quien se consolida como una de las grandes figuras de la nueva generación alemana.