El diputado federal Ricardo Astudillo Suárez propuso ante el Congreso de la Unión la creación del Fondo Nacional Banco del Agua, un instrumento financiero diseñado para financiar infraestructura hÃdrica estratégica en México mediante un modelo de corresponsabilidad fiscal.
La iniciativa establece que por cada metro cúbico de agua declarado para consumo, los organismos operadores locales aportarÃan $1 peso, monto que serÃa igualado con recursos públicos federales. Este esquema permitirÃa generar un fondo con un capital inicial estimado de 342 mil 94 millones de pesos, según proyecciones basadas en datos de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) para el año 2025.
De esa cifra, 171 mil 47 millones de pesos corresponderÃan a una erogación directa del erario federal, lo que representa un impacto presupuestario significativo. No obstante, el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas (CEFP) concluyó que el financiamiento es viable, y la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública emitió opinión favorable, argumentando que se trata de un gasto alineado con fines constitucionales en materia de acceso al agua potable y desarrollo sustentable.
El fondo estarÃa destinado a obras como la construcción y rehabilitación de plantas de tratamiento, bordos, presas, sistemas de captación pluvial y acciones de conservación en zonas de recarga hÃdrica. También se contempla su uso en la atención de contingencias derivadas de sequÃas, sobreexplotación y contaminación de cuerpos de agua.
Astudillo Suárez destacó que esta herramienta permitirá asegurar el derecho humano al agua, fortalecer la resiliencia hÃdrica nacional y reducir desigualdades en el acceso a este recurso estratégico. Si la propuesta avanza en comisiones unidas y es aprobada por el pleno, el fondo podrÃa entrar en vigor en 2026.
El Fondo Nacional Banco del Agua se presenta como una medida de largo plazo, con carácter estructural y potencial de impacto en la planeación hÃdrica nacional, al tiempo que incorpora mecanismos de corresponsabilidad y transparencia fiscal.